domingo, 8 de febrero de 2015

[Crónicas Pachangueras] Glendios es mi zorra.

Ayer tuve una de esas partidas memorables. De esas en las que dedicas más de cuarenta minutos en terminar, y que están llenas de risas. Y que terminan de la forma más inesperada, lo cual acarrea muchas más risas. De esas partidas que te hacen recordar porque adoras este jodido juego, y una de esas razones por la que das gracias por poder jugar en el formato japonés, pues sino no podrías disfrutar de tales cartas. Sí, ayer jugué contra una Glendios. Y sí, ayer gané (dos veces) a una Glendios. Creo que la siguiente imagen describe perfectamente lo que fue la partida.
La primera partida contra Glendios no fue, sinceramente, nada memorable. Más que nada porque termino como empezó: Con un rush del copón y sin dejarle al oponente hacer nada.
Imaginaros lo que es empezar con Amber Dragon (porque "REAL KAGERO USERS USE AMBER DRAGON TO BE HIS FVG"), marcarse la cadena (porque tiene una fiabilidad del 95%, comprobado por técnicos expertos del Dragon Empire), y en turno tres tener a Dragonic Blademaster en vanguardia, hacer una stride... y que el rival se coma un crítico 3. Por supuesto, fue lo que en mi barrio llamamos "OTK".
Allí ya las risas empezaron. Gerard no sabía como enfrentarse a una Kagero que casi no sacaba campo y que, además, le rusheaba con un vanguardia de la hostia. Y a mi, sinceramente, me daba igual todo. Todo a la drop zone, y a darle stride a discreción. Así andaba, que mi baraja se iba quedando más vacía que una Genesis en turno 4.
El funcionamiento era el siguiente: Glendios en vanguardia, sacaba dos reverse y pegaba que daba gusto. Como yo tenía el campo vacío, no tenía nada que "lockear".
Mi funcionamiento era el siguiente: Stride. Counter 1. Una de las reverse a toma'l por saco. Sacaba a Mahmoud (por cierto, Dragonic Blademaster y Mahmoud son muy islámicos, y eso hace que me pegue otras risas con Saad).
Entonces él tenía dos opciones: Una, usar el grado 1 joputa R que redirige un ataque a un reverse, o que le atacase al vanguardia y le mandase a pastar a su otro reverse por efecto. Le hice llorar.
Eso si, llego un punto en la partida en que tuve que sacar alguna que otra unidad al campo (ya fuese el g1 que hace unflip 2 mandándolo al soul, o al arquero para que atacase y retirase más campo al rival, y claro está, él aprovecho eso para bloquearlos a todos (es Glendios... ¿Qué esperabais?).
Hacía el final de la partida, un servidor estaba bastante jodido, pues le quedaban pocas cartas en la baraja (las stride es lo que tiene), así que decidí usar mi última carta. Sí, tenía unos DOGE en mano, así que decidí hacer arder al mundo. Era tan sencillo como sacar DOGE, hacer legion, devolver un heal (estaba a 5 de daño) y devolver 2 críticos. Más que nada porque necesitaba el Neoflame que tenía en la drop, que sino hubiesen sido más críticos.
Los cálculos estaban hechos. Todo lo que me quedaba en la baraja eran críticos y heal (y un draw que podía hacerme perder la partida). Y claro, ya sabéis de que palo pega mi amigo DOGE. Digamos que empecé a dárselo todo a él (porque ya sabéis, tenía el campo vacío para que Glendios no me hiciese su Fin del Mundo). En el primer turno, heal y críticos a mansalva. Empecé a reírme, aunque él paró mis ataques.
Y allí fue el punto más divertido, y lo que me hizo ganar. Él no tenía casi mano, y mi mano era todo triggers (y una defensa perfecta de las nuevas, de las que hacen unflip). Él se lo jugó todo a una, sacó sus reverse y me atacó ricamente. Me lo paré todo.
Empecé yo de nuevo, en lo que sería mi último turno. Quedaban dos cartas en mi baraja. Dos triggers. Uno de ellos un draw que me haría perder la partida si me tocaba. Hice legion. Devolví un Neoflame (para hacer legion) y tres críticos. Iba a ir a tope.
Saco DOGE (en retaguardia). Ataco con DOGE, él lo para. Ataco con la vanguardia a retaguardia. Crítico. Crítico. Todo a vanguardia. Uso habilidad y DOGE en retaguardia se va. Adiós a su última reverse (adiós al grado 1 que le iba a hacer ganar la partida por deckout).
Ataco a vanguardia. Él se defiende con toda su mano. Me dice que con dos entra. Yo empiezo a reírme mucho y le enseño todos los triggers que tengo en mi cementerio. "Sólo me quedan triggers". Él se ríe. Yo me río más. Le digo: "Glendios es mi zorra". Él me contesta "Si te toca el draw pierdes por deck out". Yo confiado le contesto "Tengo 4 cartas en mi baraja. 3 críticos y 1 draw. Tengo un 25% de probabilidades de perder, pero yo sé que ya he ganado". Crítico. Crítico.
Apogeo máximo. DOGE pega de 5. Venga, saca heals, maldito.
Final de partida. Tal y como estaba la mesa.
Después de esto, la única respuesta que había es: "Ya verás cuando le saquen una legion revival a Glendios, me vengaré de esa". Y como todo el mundo sabe, lo más probable es que se la den a "Chaos Breaker Dragon", por lo que sólo pude contestar: "No, no. Nada de legion. Ahora Glendios es mi zorra". Y así toda la tarde. Y así toda la noche. Hasta que me fui a dormir. Y hasta que me canse. Soy un pesado, lo sé, pero la diversión de la partida no me la quita nadie.

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